jueves, 5 de febrero de 2015

DUBAI - EMIRATOS ÁRABES UNIDOS. 2ª parte.

Continuando mi corto recorrido acotado por el tiempo disponible me dirigí al Gold Souk de Dubai, es un mercado aparentemente interminable, en el cual se exhiben cantidades de joyas de oro. En el zoco cuya entrada está marcada por arcos de madera más de 300 joyerías satisfacen todas las necesidades relacionadas con el oro, sus calles son recorridas por una multitud de turistas de todo el mundo que disfrutan de la exhibición de una amplia gama de joyas elaboradas en oro que ocupan la totalidad de las vidrieras y, por supuesto de los altos precios que no dan lugar al regateo. Es muy interesante reparar en aquellas joyas que lucirán las novias de las bodas árabes, las cuales se destacarán sobre la abaya (túnica) y el nigab (velo).

Dedicaré un pequeño espacio a los centros comerciales, Dubai cuenta con más de medio centenar de ellos que ofrecen mercancías, espectáculos y atracciones fantásticas, este combo es un verdadero señuelo para las tarjetas de crédito. La fecha, próxima a la Navidad, resaltaba aún más la decoración y los escaparates lucían productos propios de su cultura oriental a la par de los de origen tecnológico occidental.
El Dubai Mall es el más grande y más visitado del mundo, vale la siguiente comparación: recibe en sus 1.200 locales comerciales más visitantes que la ciudad de New York. Entre sus atracciones cuenta con pista de esquí cubierta con nieve artificial cuya acumulación y temperatura se mantienen a pesar de las altas temperaturas externas.
Otro centro comercial cuenta con un parque jurásico, en el cual los saurios tienen movimientos mecánicos, otro cuenta con embarcaciones para trasladar a los clientes de sus tiendas o restaurantes a los muelles de los hoteles vecinos.


El traslado a Instituciones Oficiales y Empresas, me permitió tomar algunas fotografías a través de las ventanillas del transporte, entre las mismas se destacaron dos símbolos que reflejan la transformación que tuvo Dubai en estos últimos 30 años: la Torre Burj Khalifa y el Metro.
Este último fue diseñado para salvar los problemas de congestión vehicular y para transportar 350 millones de pasajeros al año. Es un sistema ferroviario automatizado, moderno, rápido y económico.
En esa época estaban construyendo la tercera línea de las cinco diseñadas. Las dos primeras tienen una longitud de 70 kilómetros y 47 estaciones, nueve de ellas subterráneas en el centro de la ciudad y las restantes en viaductos elevados en la zona suburbana. Es todo un espectáculo observar los puentes grúas elevando y ensamblando las estructuras de hormigón de los viaductos elevados para superar las avenidas.
Los trenes del metro de Dubai están diseñados para llevar 643 pasajeros sentados, ofrecen vagones sólo para mujeres, vagones para familias y vagones VIP (llamados Gold Class). El metro funciona de forma totalmente automática sin conductor. Las estaciones acordes al metro son de un refinado diseño moderno, confortables, ordenadas y limpias. Los horarios se cumplen estrictamente.

La Torre Burj Khalifa, hazaña de la ingeniería moderna fue inaugurada en la primera semana del mes de Enero del año 2010, es decir unos días después del registro fotográfico que se adjunta. Es uno de los lugares preferidos por las agencias de turismo para seducir viajeros, su altura total de 828 metros la hace la más alta del mundo. Emerge entre los edificios del downtown como un faro en la costa marina, su aguja se divisa a kilómetros de distancia. Algunos datos que la destacan: 192 plantas de las cuales 163 plantas son habitables, en su piso 122 restaurante de cocina internacional del más alto nivel, plataforma de observación en su piso 124, un número de 900 residencias, 37 pisos de oficinas, Hotel Armani con 160 habitaciones y suites, 57 ascensores, refugios contra incendios cada 25 pisos, más de 100.000 m² de parque, gimnasio de 4 plantas, supermercados, cines, teatros, en uno de sus ingresos está localizado el Dubai Mall, y está rodeado de una fuente danzante que lanza chorros de agua de una altura superior a los 150 metros.


En lo que hace a la actividad comercial motivo de la visita, se destacó el seminario que se realizó el primer día y contó con autoridades oficiales, empresarios e industriales de los EAU, además de representantes comerciales de Europa y de América.



Posteriormente participé de rondas de negocios y de visitas a Instituciones Oficiales, Zonas Francas e importantes Empresas, lo cual permitió sacar las siguientes conclusiones:
  • Es un mercado en expansión, con crecimiento sostenido, que por su posición geográfica le da la importante ventaja de acceder a un mercado potencial de 250 millones de consumidores con alta demanda de alimentos lo cual les permite ser un hub de exportación. 
  • En los EAU existen 37 ZF con moderna infraestructura y rapidez administrativa. 
  • Desarrollan una política económica liberal, poseen una de las mayores reservas del mundo de petróleo y gas. 
  • El turismo pasó a ser una importante fuente de ingreso.


Abu Dhabi, capital de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) y uno de los principales productores de petróleo del mundo, dista de Dubai 150 kilómetros. Allí estaba jugándose la copa de fútbol de clubes campeones de los distintos continentes. Esa noche el club Estudiantes de La Plata de Argentina disputaría la semifinal y allá fuimos, previa obtención de las entradas que tenían un precio por demás accesible.
Recorrimos la distancia mencionada por una autopista de cuatro carriles en cada sentido, con sus costados arbolados y verdes a pesar del desierto y protegida por una interminable reja de hierro perimetral para evitar el cruce de los camellos. Arribamos a un estadio multipropósito que dispone de excelentes comodidades para 42.000 espectadores.

La organización muy buena, todo ordenado desde el ingreso hasta llegar al asiento asignado. El campo de juego lucia impecable. El entusiasmo de los simpatizantes del club Estudiantes y el colorido de sus vestimentas contrastaba con la calma imparcial y las túnicas blancas de los árabes.







Sorprendió la asistencia de mujeres jóvenes con rostro descubierto.
El egreso fue como el ingreso, controlado y ordenado.

Por la hora solo fue posible ver a la distancia la increíble Mezquita Sheikh Zayed, una de las más grandes y sin dudas la más lujosa del planeta; consta de 57 cúpulas de mármol blanco y tiene capacidad para 30 mil personas. Vale la pena mencionar también la cantidad de edificios con las formas más antojadizas, el parque temático de la automotriz Ferrari, el circuito de alto nivel para carreras de fórmula uno, y un sin número de estructuras dedicadas a la cultura y al deporte, en pro de intensificar su turismo internacional.
En uno de los traslados para visitar empresas, tuve la oportunidad de obtener una foto parcial del hotel de siete estrellas Burj Al Arab de 321 metros de altura, las otras dos tomas son al atardecer y por la noche, las mismas ponen de manifiesto la edificación del hotel sobre una isla artificial en el Golfo Pérsico o Arábigo, distante 270 metros de la playa de Jumeirah.


A la noche concurrí invitado por la Embajada Argentina a una reunión social lo cual me permitió recorrerlo internamente. Cuando el conductor me indicó que estábamos arribando, emergió a mi derecha el Jumeirah Beach Hotel que como su nombre lo indica está ubicado en el límite de la playa y el Golfo Arábigo. 
Accedimos a una carretera sobre el mar y a nuestro frente se recortó en el horizonte como una vela henchida al viento el Hotel Burj Al Arab, mi primera impresión fue la de un edificio flotando sobre el mar. Su forma de vela que lo distingue, evoca los viejos navíos que navegaron las aguas del golfo, y su distancia a la tierra firme evita que la sombra que proyecta alcance la playa.


En su estacionamiento encontré una verdadera competencia de autos lujosos y deportivos, al margen de la flota de vehículos Rolls Royce que el hotel ofrece a sus huéspedes las 24 horas del día. 


Una fuente, la escultura de un camello, y un grupo de esferas de mármol era el preámbulo de la puerta de ingreso indicada por un sobrio mármol.


Como resistirse a tener una foto que describa tan amplio hall de ingreso, que contaba con decoración navideña, aguas danzantes con efecto de color, alfombras de colores vivos, etc.
Las columnas de la estructura de las 60 plantas y los balcones de acceso a las amplias habitaciones, intimidan. 
Las escaleras mecánicas que llevan a la plataforma de los ascensores son custodiadas por enormes peceras que sorprenden con una diversidad de especies marinas.
Los asombros no terminaban, los ascensores principales son tan lujosos que sus puertas están revestidas por láminas de oro, además tienen un desplazamiento muy veloz. Cuenta, para pasajeros y personal, con un total de 18 ascensores. 
Llegué al Athuraya Boardroom, sala con llamativa decoración reservada como su nombre lo indica para reuniones de pocos asistentes, en la oportunidad autoridades, personal de la embajada, empresarios. 








En uno de los vestíbulos, me llamó la atención la vestimenta del personal del hotel.
No podía dejar de visitar uno de los World Class Bars del hotel, disfrutar de su estructura, de la simpatía de su personal, de un exótico trago y de las luces multicolores exteriores. 










Un recorrido por su interior permite apreciar visitantes genuinos de los Emiratos, un comercio de joyería con productos de alta gama en oro, el decorado de brillante colorido, las alfombras indias, fuentes de agua danzantes con efectos multicolores. 










Cuenta con 9 restaurantes, uno de ellos el Al Mahara se encuentra bajo el nivel del mar y deleita a sus clientes con un menú internacional y un acuario que se extiende desde el piso al techo. Contrastando con este restaurante ubicado a 200 metros de altura y con una excelente visión panorámica se encuentra el Al Muthaba. Otro restaurante es el Bab Al Yam al aire libre y a la vera de la playa.
Visité el suntuoso Restaurante Al Iwan, que me ofreció un buffet árabe en un entorno espectacular con vista al mar. 


Terminó la visita y nada mejor que una postal con un representante originario de los Emiratos, la fuente de ingreso, las esferas de mármol y el efecto de las luces de neón. 




Llegó la hora de dejar Dubai, el área de los vuelos de partida es amplia y vale la pena mostrar algunas imágenes que concuerdan con las del ingreso ya mostrado en la anterior pincelada. 



El Aeropuerto no podía estar ajeno al Dubai de estos últimos 30 años en los cuales se transformó de un centro regional a uno global, y como lo expresa la comunicación visual estamos en presencia de un importante Hub del transporte aéreo. Les solicitó que presten atención al señor con túnica blanca que se desplaza en tercer lugar en el costado izquierdo de la foto mayor.
Es un aficionado al deporte de la cetrería, muy común en los EAU, que viajará con sus halcones en la cabina de la aeronave. Los halcones tienen una capucha que los priva de ver y escuchar, a pesar de ello el destello del flash les molesto. Están posados en una percha diseñada para el transporte. Despertó la curiosidad de niños y adultos, a la par del orgullo de su dueño.




Una imagen más que muestra el confort que brindan las salas de espera.
Para finalizar esta pincelada incorporo un plano con indicaciones de los lugares principales de la ciudad, imágenes de lo que es la revolución edilicia y, como se proyectan los atardeceres en la ciudad.



Todas las actividades citadinas se complementan para aquellos que disponen de tiempo con la realización de los promocionados safaris en 4 x 4 por las increíbles dunas del desierto arábigo, las cuales generalmente finalizan con una cena de cordero asado acompañado de bailes tradicionales; también recomiendan una cabalgata en camello; o un tour en globo aerostático sobre el desierto; o una excursión de pesca en el golfo.
Otros lugares de interés son la visita a Hidropolis, primer hotel bajo el agua; o el Wildwadi, parque acuático; o la ciudad de los Deportes.
La oferta turística se complementa con espectáculos deportivos, artísticos y culturales a nivel mundial.
Se trata de un destino fascinante con una cultura tan rica como atrapante.


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